Mi fiel piloto Atoms |
Para cruzar un océano, sobre todo si se navega en pareja o con tripulación reducida, es fundamental contar con un sistema de gobierno que nos permita liberarnos de llevar el timón durante la travesía. De esta manera podremos hacer las actividades cotidianas sin la obligación de estar horas y horas poniendo el barco a rumbo, algo que se hace muy cansado en la primera jornada.
Básicamente hay dos tipos de pilotos automáticos: electrónicos y de viento y yo me inclino por este ultimo ya que creo que todo son ventajas. La primera y mas importante es que no consume energía de ningún tipo y eso evita que tengamos que recargar las baterías continuamente. En segundo lugar no hace ruido y esto es de agradecer cuando son muchas las millas a recorrer. Navegué en un velero grande que tenía un piloto electrónico potentísimo pero todo el día teníamos que oír sus gruñidos y especialmente a la hora de dormir se hacia insoportable.
En caso de avería, algunos de sus componentes se pueden arreglar con los medios de a bordo, una gran ventaja frente a los electrónicos que debido a su complejidad, es prácticamente inviable.
Por otro lado, la fiabilidad en mal tiempo. Usualmente el viento sube y entonces es cuando el piloto muestra su mayor efectividad ya que la respuesta al timón es mas rápida debido a que la pala superior o aéreo ejerce mas fuerza y con mayor rapidez.
Nunca hay que instalar un piloto de viento y salir a navegar para hacer una larga travesía sin haber verificado su correcto funcionamiento ya que si estamos en la mar, no será posible hacer los cambios necesarios en la instalación para que de el rendimiento adecuado. Además se requiere aprender a trimarlo previamente.
Por otro lado, la fiabilidad en mal tiempo. Usualmente el viento sube y entonces es cuando el piloto muestra su mayor efectividad ya que la respuesta al timón es mas rápida debido a que la pala superior o aéreo ejerce mas fuerza y con mayor rapidez.
Nunca hay que instalar un piloto de viento y salir a navegar para hacer una larga travesía sin haber verificado su correcto funcionamiento ya que si estamos en la mar, no será posible hacer los cambios necesarios en la instalación para que de el rendimiento adecuado. Además se requiere aprender a trimarlo previamente.
En el viaje que realizamos alrededor del mundo mi pareja y yo, el 90 % del tiempo el piloto de viento llevó el barco, un 9% el electrónico (cuando hacíamos uso del motor por falta de viento) y sólo un 1 %, tuvimos que timonear a mano.
Si necesitas que alguien instale tu piloto de viento y te enseñe a aprender a trimarlo, envíame un e.mail.
yo acabo de encontrar un piloto Bogasol,y estoy instalando lo en mi ww35,
ResponderEliminarsuper ilusionado !
a ver que tal...
Joan.